Ser un gran líder significa reconocer que diferentes circunstancias requieren diferentes estilos de liderazgo. Aquí presentamos tres estilos comunes y cuándo aplicarlos.
Estilos De Liderazgo
Liderazgo coercitivo:
Implica exigir cumplimiento inmediato. Este es el estilo menos efectivo en la mayoría de las situaciones. Pero en ciertas crisis donde se necesita una acción decisiva y una cadena de mando clara, este estilo de mando y control puede ser necesario.
Liderazgo Autoritativo:
Se trata de movilizar a las personas hacia una visión. Esto implica motivar a los miembros del equipo conectando su trabajo con una estrategia organizacional más amplia. Este estilo de liderazgo es beneficioso en muchas situaciones, y es particularmente útil durante tiempos de cambio o incertidumbre.
Liderazgo Ejemplar:
Implica esperar excelencia y autodirección. Aunque este estilo debe usarse con moderación, puede funcionar en ciertas circunstancias donde los empleados están altamente motivados y son sumamente competentes, o cuando la perfección es absolutamente necesaria.
En conclusión, comprender y aplicar diferentes estilos de liderazgo según la situación es clave para ser un líder eficaz. Al reconocer cuándo es apropiado utilizar el liderazgo coercitivo, autoritativo o ejemplar, podemos adaptarnos a las necesidades de nuestro equipo y las circunstancias, promoviendo un ambiente de trabajo más productivo y armonioso.
Este tip es adaptado de los artículos y publicaciones realizadas por Harvard
Business Review.
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